Brexit y protección de datos

El próximo 30 de marzo es la fecha prevista para que se haga efectivo el Brexit. A partir de entonces, el Reino Unido pasará a ser un país tercero respecto a la Unión Europea y el Espacio Económico Europeo. A pocos días para la fecha límite, todavía no hay acuerdo entre ambas partes y son muchas las incertidumbres que se presentan. Uno de los aspectos que más preocupan es son las transferencias de datos personales.

TRANSFERENCIAS INTERNACIONALES DE DATOS

El Reglamento Europeo de Protección de Datos regula la comunicación de datos personales a empresas de terceros países u organizaciones internacionales no establecidas en la Unión Europea.

Las cesiones de datos personales a clientes o proveedores establecidos dentro de la Unión Europea no se consideran transferencias internacionales.

En caso de un Brexit sin acuerdo, las comunicaciones de datos al Reino Unido pasaran a considerarse transferencias internacionales.

¿SE PODRÁN REALIZAR TRANSFERENCIAS AL REINO UNIDO SI NO HAY ACUERDO?

En general, podemos decir que el RGPD permite realizar transferencias internacionales cuando exista y se pueda demostrar un nivel de seguridad de los datos adecuado.

En concreto, las empresas que quieran transferir datos al Reino Unido dispondrán de las siguientes opciones:

• Normas corporativas vinculantes. Son políticas de protección de datos asumidas por un grupo empresarial. Las empresas del grupo con presencia dentro y fuera la UE podrán cederse datos. Las normas deben ser jurídicamente vinculantes y aprobadas por la autoridad de control.
• Cláusulas tipo. Contratos aprobados por la Comisión Europea que no pueden modificarse. Regulan la relación entre una empresa europea y la de un tercer país, ofreciendo garantías adecuadas para la transferencia de datos personales.
• En casos excepcionales previstos en el RGPD (ver aquí).

Pueden consultar la nota informativa del Comité Europeo de Protección de Datos (CEPD) en este enlace.